lunes, 1 de febrero de 2010

Timing.

El tiempo a veces es el peor enemigo que puede tener un alma solitaria. Demasiado tiempo para pensar. Para complicar una realidad muy sencilla, con el unico objetivo de que pase algo. Mucha negatividad para refrenar esas ganas de quererlo todo. Para controlar esos sueños que se escapan de las manos. Hay que tener cuidado, llega un momento en que la negatividad, el pesimismo se te incrustan en la venas. Pasan por tu sangre. Y acaban formando parte de ti. Acabar cansado, de todos, y de ti. Y tener permanente ese sentimiento de tristeza. Que se agranda, cada vez que te pones a pensar. Llegar a casa. Recibir una llamada. Y agradecer. A las personas que vienen a mi solo para hacerme sonreir. Para hacerme bien. Y para hacerme feliz. Hace unos dias me preguntaba donde se habia quedado el amor. Donde se habia quedado el respeto. A las personas. A mi.

Y despues de unas semanas algo moviditas en cuanto alma puedo decir. E intentando complicar lo menos posible. Que el amor es eso que hace bien. Esas personas que me miran. Y me ven a mi. Sin complejos. Sin excusas. Sin dolor. El amor es una noche de risas. O una tarde en una montaña enorme aprendiendo fotografia. Los pequeños detalles. Que olvido casi siempre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario